Debate: el menos peor…

De lo que vi anoche, me quedo con el traje de Lanata (es violeta Fashional…)
 

Macri: “Vos no vinistes (al anterior debate). Vos dijistes…”

Scioli: “Dije que íbamo a tener…”

 
Las eses que le sobran a uno le faltan al otro. Por lo menos empataron en el tópico Educación…
En el resto perdió Scioli sólo por más bruto. Es patético verlo repetir las acusaciones catastróficas sin cambiar una palabra.
No hace falta ser la Dra. Pignata para decir que me harta el discurso populista del más obvio, con eso del orgullo nacional y toda la perorata demagógica que cae por su propia contradicción.
Ya lo vi en Cuba. En las rutas de los años 30, sin luz y hechas guayaba, hay carteles con frases de Martí o Fidel sobre los 50 años de “victoria”. En la ciudad del mausoleo del Che se puede leer: “Santa Clara: culta, laboriosa, heroica”. Eso es azucarar al pueblo para “convencerlo” de que es importante. Sí sí, quién lo duda, los zafreros que andan en carretas son prioridad para la dirigencia política que vive en el selecto barrio de Miramar de La Habana, claro…
Ah, y digo para Macri: en Cuba también hay carteles de “Sí se puede”.
Definitivamente, no fue el día del pobre Dany. La catalana Pilar Rahola ya le había hecho pasar vergonya a Karina en la mesa de Mirtha. Es que Scioli fue parte de los K. Eso sí, no quiere que le hablen del pasado cuando no le conviene. Si es por la inflación o la corrupción, ah no, eso es del gobierno que termina el 10 de diciembre. Ahora, si es por los planes sociales, YPF, Aerolíneas, etc, etc, eso es del gobierno que él representa con toda la convicción.
Por su parte, Macri le reprochaba a Scioli: “Que diga la verdad, mentir es gravísimo. La confianza se basa en la verdad”. Y lo desafió: ¿Cristina dice la verdad cuando dice que hay un 5 % de pobres?. ¿Aníbal dice la verdad cuando dice que en Alemania hay más pobres que en Argentina?.
Yo le preguntaría a Macri: ¿Vos decís la verdad cuando decís que las pautas truchas son error de carga?. ¿Y tu pichón local dijo la verdad cuando dijo que 2 cebras eran la solución a los problemas de tránsito de Junín?.
Insisto que es sólo una cuestión de grados. Por supuesto que hay mentiras más graves que otras. Pero la esencia es la misma: zafar como sea.
Más ejemplos.
Macri empezó el debate hablando de Pobreza Cero (política sin milagros, dirá más adelante…)
Yo le preguntaría: si hay 14 millones de argentinos en la pobreza ¿de verdad creés que vas a erradicarla en 4 años?. Por año debería lograr 3,5 millones menos de pobres (6 provincias de Formosa enteras…).
 

Dijo Lanata: ¿Estamos eligiendo a quien miente menos?
 

Retomando lo de creer…
Macri le saca el jugo a un truco archiconocido: la cuestión de fe. El tipo te puede contestar “Sí, creo que voy a hacerlo”. Y se lo podés discutir todo el debate que si “lo siente en el corazón”, ya parece que es suficiente…
Otro ejemplo: “Yo no dije que voy a devaluar”. Te lo niega y listo. Por eso la importancia de mostrar pruebas. Igual puede seguir negando, pero lo dejás en evidencia con su mentira (de esto mi blog sabe bastante…).
Algo quedó clarísimo: Scioli no contesta porque no se sale del libreto. Le preguntás sobre los días de clases perdidos, y te habla del ARSAT. Le preguntás por la mortalidad infantil, y te “contrarresta” con la ley de fertilización…
Macri no hace precisamente apología de lo concreto. Te engancha con frases motivadoras como “sueños, alegría, esperanza, hacerlo juntos, podemos estar mejor”, etc.
Ambos están en el mismo juego con toditas sus trampas. Critican del otro las mismas faltas que ellos cometen.
Macri: “La política no es correte que pongo a mi amigo”. No, ya lo creo. A veces es correte que pongo a mi cuñado en la secretaría general… (¿Querés un ejemplo local Mauri?.
Macri le cuestionó a Scioli la falta de insumos en los hospitales.
Lo que parece que no vio fue el almuerzo de Mirtha. La médica que atiende a la beba abandonada en la estación de servicio dijo que en el Santojanni (CABA) sólo tienen un estetoscopio para toda neonatología. Es más, que le hubiera gustado estar el sábado en la mesa (con Macri) para preguntarle sobre el tema.
 

CONCLUSIÓN

 
Ambos son incontrastables con la realidad. Más de lo mismo con diferencia de grados.
Scioli queda más expuesto porque es muy “grueso” en su relato. Macri hace lo propio pero un poco más políticamente correcto o elegante…
No votaría a ninguno. De hecho no lo haré. Pero creo que Macri es el menos peor. Qué triste. Igual es preferible esto a que ISIS vea el saco de Lanata.