
Hoy me toca hacerle “marketing” a ella. Mi bombón de caramelo…
Casi todos los gatos naranja son machos y de pelo corto. Pero ella es una nena con melena y cola plumero. Sí, tan original, que esperaba a Felipe y vino Felicitas! (cosas que ven los veterinarios con apenas mirar más allá de los bigotes…).
Hace justo 9 meses. Y conectamos como si la hubiera parido…
Según la ciencia, los también llamados “ginger cats” son especiales, más cariñosos que los de otros colores. Y sí, de hecho vienen con la “M” de mimosos en la frente.
Feli llegó a casa en el momento que ni imaginaba volver a tener mascota. La despedida de Flocki (mi perra bóxer) después de 11 años fue muy fuerte. Aunque por algo pasan las cosas. Un domingo apareció el hada Valentina (amorosa protectora de mininos) con una traviesa criatura que se había perdido (metido sin permiso) en una oficina del centro.
¿Lo querés en adopción?. No sin dudas, dije que sí. Fue todo muy gracioso. Hasta se lo llevaron a una quinta creyendo que era un tal Teo. Y no, era Feli, el Felipe devenido en la Felina que me cambió de nuevo la rutina y me llenó de ternura cada rincón convertido en escondite.
La verdad que hoy, como casi todos los días de estos meses previos a mi nuevo emprendimiento, estoy con poco tiempo. Pero no podía dejar de compartir unas fotos domésticas y algunas notas de color… naranja…












